Revista N°7. Septiembre 2007
“La poesía pertenece al futuro de nuestra especie, es decir a la revolución, a la humanidad redimida”
No queríamos privarnos de escuchar la voz de quien vive la experiencia de la poesía día a día en la lectura y la escritura, en plena conciencia de su tiempo, con amor y compromiso social. En estas páginas Kuky Leonardi Herrán, poeta salteña, traductora, docente universitaria de Filosofía y militante activa, opina sobre la poesía, su escritura, la crítica y su lugar en nuestra sociedad. Además es coordinadora de talleres de poesía y una de las voces poéticas más destacadas de la Generación del 60. Entre sus obras se encuentran “Incesante memoria”, “Crónicas de la edad de hiero”, “El corazón tatuado”, “Blues del contraolvido”, “Rizomas” y su reciente libro “Noticias de los Comulgantes”.
- ¿Cómo vive la experiencia de la escritura de un poema?
Escribir es una profunda felicidad y una larga paciencia. No creo tanto en la inspiración como en el trabajo, la disciplina, la imaginación, la entrega apasionada a un oficio que supone fidelidad total a la vida, a las emociones, a los sueños, a la utopía.
- ¿Qué piensa de las lecturas críticas de Literatura en general?
La crítica literaria ha dejado de ser la “hermana pobre” de la escritura. Desde su pasado estatuto ancilar y subalterno ha devenido un género literario donde es posible encontrar no sólo la dimensión valorativa que le es inherente sino también lo que Barthes llama “placer del texto”. En mi caso por ejemplo leer a Blanchot, Derrida, Steiner, Sarlo, Badiou u otros es un gozo que te diría que casi se equipara con el disfrute que me da la poesía.
- ¿Qué lugar tiene la poesía, desde su punto de vista, en la sociedad salteña?
La poesía, tanto en Salta como en el país o en el mundo, no es un género literario que goce de la preferencia del público. Nunca vimos ni vemos en la lista de bestsellers un libro de poemas. Y esto se contradice con lo que afirman los estudiosos: que la poesía es lo “resplandeciente” de la literatura y que en el siglo de Internet su vigencia será más auspiciosa que la novela o el cuento. No es verdad que “la narrativa gana la partida”, la gana coyunturalmente por la hegemonía del “mercado”. La poesía pertenece al futuro de nuestra especie, es decir a la revolución, a la humanidad redimida.
- ¿Cree que en la actualidad la poesía es un género mucho menos frecuentado que otros?
Sí. Creo que una causa fundamental por la que el público lector no frecuenta la poesía es el desinterés que la escuela y la universidad manifiestan en torno a la poesía. La mayoría de los maestros y profesores parecen estar peleados con el género lírico. Basta echar una ojeada a los programas de literatura y observar el espacio que se les concede a los textos poéticos. Así es como se expande esa parte del “analfabetismo lírico” y se fomenta una especie de temor a leer poesía porque se la considera de difícil acceso u obsoleta. O incluso hay veces donde triunfa la genuflexión ante el “mercado”. Egresan licenciados de la universidad que nunca leyeron a Vallejo o a Char, por ejemplo. Pienso que en este aspecto hay que dar un giro copernicano y comenzar a privilegiar la lectura y el estudio de los grandes poetas del presente y del pasado.
- ¿Cómo vive la experiencia de la escritura de un poema?
Escribir es una profunda felicidad y una larga paciencia. No creo tanto en la inspiración como en el trabajo, la disciplina, la imaginación, la entrega apasionada a un oficio que supone fidelidad total a la vida, a las emociones, a los sueños, a la utopía.
- ¿Qué piensa de las lecturas críticas de Literatura en general?
La crítica literaria ha dejado de ser la “hermana pobre” de la escritura. Desde su pasado estatuto ancilar y subalterno ha devenido un género literario donde es posible encontrar no sólo la dimensión valorativa que le es inherente sino también lo que Barthes llama “placer del texto”. En mi caso por ejemplo leer a Blanchot, Derrida, Steiner, Sarlo, Badiou u otros es un gozo que te diría que casi se equipara con el disfrute que me da la poesía.
- ¿Qué lugar tiene la poesía, desde su punto de vista, en la sociedad salteña?
La poesía, tanto en Salta como en el país o en el mundo, no es un género literario que goce de la preferencia del público. Nunca vimos ni vemos en la lista de bestsellers un libro de poemas. Y esto se contradice con lo que afirman los estudiosos: que la poesía es lo “resplandeciente” de la literatura y que en el siglo de Internet su vigencia será más auspiciosa que la novela o el cuento. No es verdad que “la narrativa gana la partida”, la gana coyunturalmente por la hegemonía del “mercado”. La poesía pertenece al futuro de nuestra especie, es decir a la revolución, a la humanidad redimida.
- ¿Cree que en la actualidad la poesía es un género mucho menos frecuentado que otros?
Sí. Creo que una causa fundamental por la que el público lector no frecuenta la poesía es el desinterés que la escuela y la universidad manifiestan en torno a la poesía. La mayoría de los maestros y profesores parecen estar peleados con el género lírico. Basta echar una ojeada a los programas de literatura y observar el espacio que se les concede a los textos poéticos. Así es como se expande esa parte del “analfabetismo lírico” y se fomenta una especie de temor a leer poesía porque se la considera de difícil acceso u obsoleta. O incluso hay veces donde triunfa la genuflexión ante el “mercado”. Egresan licenciados de la universidad que nunca leyeron a Vallejo o a Char, por ejemplo. Pienso que en este aspecto hay que dar un giro copernicano y comenzar a privilegiar la lectura y el estudio de los grandes poetas del presente y del pasado.
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